¿Debe bautizarse a los niños pequeños?
Nuestros lectores quieren saber
¿Debe bautizarse a los niños pequeños?
▪ “Me angustiaba la idea de que mi hermano pequeño, John, estuviera en el limbo”, cuenta Victoria. ¿Por qué se sentía así? “A John no lo habían bautizado cuando murió, y un cura dijo que eso lo condenaba eternamente al limbo.” ¡Con razón Victoria estaba angustiada! Pero ¿enseña la Biblia que los niños que mueren sin bautizar están condenados para siempre?
La Biblia sí enseña que los cristianos deben ser bautizados. El propio Jesús mandó a sus seguidores: “Hagan discípulos de gente de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del espíritu santo, enseñándoles a observar todas las cosas que yo les he mandado” (Mateo 28:19, 20). Según este texto, para que alguien sea bautizado, primero debe ser discípulo de Jesús, es decir, tiene que conocer a Jesús y haber decidido seguir sus pasos. Y es obvio que un bebé no puede tomar semejante decisión.
Así y todo, algunas personas aseguran que el mandato que Jesús dio de bautizar a sus discípulos incluía a los niños pequeños. El pastor luterano Richard P. Bucher declaró: “Todos deben ser bautizados, incluidos los niños. [...] No hacerlo los priva del perdón de pecados y los expone a la condenación eterna”. Pero afirmaciones como esta contradicen lo que Jesús enseñó al menos en tres aspectos.
En primer lugar, Jesús nunca enseñó que había que bautizar a los niños pequeños. ¿Qué importancia tiene esto? Jesús puso mucho interés en enseñar a sus discípulos los requisitos para servir a Dios. De hecho, repitió varias veces las enseñanzas clave para que ellos las comprendieran bien (Mateo 24:42; 25:13; Marcos 9:34-37; 10:35-45). Entonces, ¿por qué no dijo ni una sola vez que había que bautizar a los niños? ¿Será que olvidó mencionar ese requisito? ¡Claro que no! Si el bautismo de infantes fuera obligatorio, él lo habría dicho.
En segundo lugar, Jesús nunca enseñó que los muertos sufrieran. Más bien, creía lo que afirma Eclesiastés 9:5, que “los vivos tienen conciencia de que morirán; pero en cuanto a los muertos, ellos no tienen conciencia de nada en absoluto”. Él sabía que los muertos no acaban sufriendo en el purgatorio ni en el limbo ni en el infierno ni en ningún otro lugar. Por eso enseñaba que estaban inconscientes, como si estuvieran durmiendo (Juan 11:1-14).
Y en tercer lugar, Jesús enseñó que “todos los que están en las tumbas conmemorativas” volverán a vivir (Juan 5:28, 29). Obviamente, entre ellos se contarán los millones de personas que murieron sin estar bautizadas. Cuando resuciten, tendrán la oportunidad de aprender los requisitos de Dios y vivir para siempre en la Tierra convertida en un paraíso (Salmo 37:29). *
En resumen: la Biblia no enseña en ningún lado que deba bautizarse a los niños pequeños.
[Nota]
^ párr. 8 Para saber más acerca de la promesa de una Tierra paradisíaca y la esperanza de una resurrección, consulte los capítulos 3 y 7 del libro ¿Qué enseña realmente la Biblia?, editado por los testigos de Jehová.