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Tabàky, tratamiento de belleza a base de madera

Tabàky, tratamiento de belleza a base de madera

Tabàky, tratamiento de belleza a base de madera

▪ En el árido suroeste de Madagascar, unas mujeres caminan por la playa en busca de caracolas para vender a los turistas. Llevan la cara cubierta con una pasta de color blanco denominada tabàky. Esta asombrosa mascarilla cumple varios propósitos, pues además de proteger el cutis de los intensos rayos solares, sirve para embellecerlo.

La tabàky se elabora con la corteza de los árboles masonjoany y fihamy (llamado también aviavy). El procedimiento para su preparación es simple: las mujeres frotan un trocito de corteza contra una piedra plana, añadiéndole lentamente gotas de agua hasta formar una pasta. Después mojan en la pasta una varita de madera o plástico, con la punta fina o redondeada, y se pintan un diseño sobre la cara.

Algunas mujeres se aplican tabàky en todo el rostro, dejando solamente un pequeño espacio libre alrededor de los ojos. Otras prefieren aplicársela solo en la frente, las mejillas o la barbilla. La tabàky puede emplearse para disimular las imperfecciones, controlar el exceso de grasa en la piel o tan solo como cosmético. A veces se le añaden otros ingredientes, por ello las posibilidades de crear combinaciones de dibujos, colores y texturas son ilimitadas.

¿Quién hubiera imaginado que se podría obtener un cosmético de la madera? Pues eso es lo que se hace lejos de centros de la moda como París y Nueva York. En Madagascar, la tabàky constituye un tratamiento de belleza tan singular como práctico.